Tianguistas y personas con discapacidad ya se quedaron sin dinero
Como se han quedado en sus casas por la pandemia del Covid-19, no han podido trabajar y ya no tienen ingresos, por lo que piden apoyo al ayuntamiento de Mérida.
Por Claudia Arriaga
Mérida. Yucatán, 1 de abril del 2020.-Tianguistas, y un grupo de músicos y mototaxistas con discapacidad acudieron este martes al Ayuntamiento de Mérida para solicitar apoyo a las autoridades, pues después de tres semanas sin salir a trabajar -acatando las recomendaciones de la contingencia sanitaria- se han quedado sin ingresos.
“Nos avisaron que no se podía poner la gente en los tianguis, pienso que está bien, pero si no te mueres del virus sí de hambre. Nos pidieron parar las actividades y nos refugiemos en nuestra casa, pero desgraciadamente no tenemos qué comer”, explicó en entrevista la representante de los tianguistas, Brígida Esmeralda Pereira.
Además, aseguró que, como ella, al menos 500 personas que trabajan vendiendo sus productos en los mercados ambulantes de los parques se encuentran en la misma situación. Admitió que, aunque contaba con ahorros gracias a los cuáles pudo subsistir, estos ya se agotaron.
Finalmente, las y los tianguistas entregaron una carta con 60 firmas dirigida al alcalde, Renán Barrera Concha, para pedir su ayuda.
En el caso de los mototaxistas, la petición es que los apoyen con dinero para poder subsistir durante la pandemia.
Uno de los afectados, José Antonio May de 41 años, narró que desde hace 10 se dedica a este oficio y opera solo en el tianguis de San Roque. En total son un grupo de 15 personas que hasta el momento han cooperado entre todos para poder comer, sin embargo, ya no tienen más recursos.
“Cuando hay tianguis ganamos hasta 300 por día y ahora que no hay, aunque salgas a la calle, nadie sube; quizás sacas 30 o 40 pesos, pero nos exponemos a que nos asalten. Tenemos casi un mes sin trabajar y entre nosotros nos ayudamos con comida, pero ahora ya no tenemos”, lamentó.
Asimismo, reclamó que conseguir un empleo formal es una misión imposible para ellos, ya que con una discapacidad nadie los contrata. Tampoco cuentan con pensión o apoyo del Gobierno Federal.