Ser víctima de pornovenganza y estudiar en la UADY
Fotografías íntimas suyas fueron distribuidas entre el alumnado de la preparatoria; durante un año, sufrió burlas y señalamientos.
Por Claudia Arriaga.
Mérida, Yucatán, 27 de febrero de 2019.- Cuando Isabel tenía 16 años, fotografías íntimas suyas se divulgaron en la preparatoria de la Universidad Autónoma de Yucatán (UADY) a la que acudía. Por vergüenza, decidió quedarse callada durante un año, mientras algunos alumnos la señalaban, hostigaban y se burlaban de ella.
Los hechos ocurrieron en 2017, momento en que se enteró de que las imágenes circulaban por los teléfonos del estudiantado o se compartían en las redes sociales. Vivió momentos de desesperación y no sabía cómo reaccionar.
Fue víctima de una venganza planeada por dos jóvenes que consideraba sus amigos, quienes también asistían a ese plantel de la UADY. El rechazo hacia las pretensiones románticas de uno de ellos detonó la trama que marcaría para siempre la vida de la menor de edad.
Como si se tratara del triángulo amoroso de una telenovela, Isabel le correspondería a la persona incorrecta, lo cual provocó que, tiempo después, se le humillara públicamente.
“Cuando lo confronté, me confesó que fue un plan de uno de sus amigos, que le pidió exhibirme por venganza, por haberlo rechazado, porque no le hice caso. La idea era que nos hiciéramos novios y que estuviéramos juntos el tiempo necesario hasta sacarme el material, fotografías que ambos intercambiamos”, relató.
Esos dos muchachos distribuyeron las fotografías íntimas entre sus compañeros de la escuela, que rápidamente se viralizaron. Y, con el paso de los meses, la situación se volvió más compleja: era señalada constantemente, le hacían bromas y era hostigada. No sabía qué hacer, sentía mucha vergüenza, aunque nunca pensó en abandonar el bachillerato.
El acoso se había salido de proporciones e incluso empezó a ser desacreditada en redes sociales. También recibió mensajes en Facebook en los que le pedían más imágenes o videos, de lo contrario, sería expuesta en un sitio pornográfico. Tenía menos de 24 horas para cumplir, ella no aceptó y la exhibieron.
Alzó la voz en la UADY
Fue en octubre de 2018 que decidió romper el silencio y pidió ayuda a las autoridades de la Universidad. No era el primer caso dentro de esa institución educativa; sin embargo, por pena, muchas alumnas optan por no denunciar.
“Creo que la comunidad estudiantil no debería contribuir a distribuir ese tipo de material, no se ponen a pensar en lo que siente la víctima. La Universidad debería tomar cartas serias en el asunto, tratar de no culpar a la víctima, igual tenemos que ser conscientes de que la víctima durante mucho tiempo va a estar expuesta y sufriendo varios tipos de violencia”, comentó Isabel.
Entre las primeras medidas que la UADY tomó estuvo un careo entre la afectada y los agresores, como si se tratara de un juicio. Las pruebas recabadas en la investigación fueron contundentes y meses después se llegó a una resolución.
En enero de 2019, la Universidad expulsó a los jóvenes que difundieron las fotografías de Isabel sin su consentimiento.
Desinterés de la Fiscalía
La estudiante también acudió a la Fiscalía General del Estado (FGE) para denunciar al sitio en el que se publicó el material, así como a sus agresores, pero la respuesta del abogado de oficio que le asignaron fue “que no pasaría nada”.
“Primero me aseguraron que el caso procedería y que les llegaría un escrito a los implicados para que comparezcan. Denuncié a la página y a las personas, pero cuando me dieron un abogado me dijo que es posible que no pase nada, porque no es algo que la Policía de Yucatán pueda solucionar”, recordó.
Hasta el momento, como hemos informado en diferentes reportajes de Haz Ruido, se sabe por conducto de otras afectadas que ya suman 15 denuncias en contra de dicho portal.
Los delitos que se persiguen son extorsión, pornografía infantil y afectación de la imagen; sin embargo, se desconoce el avance de las investigaciones. Hasta el momento, la Fiscalía sigue sin pronunciarse sobre este tema.