SSY hostiga y viola derechos del personal de salud en riesgo
Como una trabajadora se amparó para proteger su salud, la dependencia estatal exhibió sus datos personales en un medio de comunicación, como su número de afiliación y las enfermedades que padece, lo que es considerado un delito.
Por Herbeth Escalante
Mérida, Yucatán, 25 de agosto de 2020.- Trabajadoras y trabajadores del sector salud que están de licencia porque padecen comorbilidades y forman parte de los grupos de riesgo en esta pandemia, acusaron a la Secretaría de Salud estatal (SSY) de hostigamiento y violación a sus derechos humanos. Algunos se ampararon al ser presionados para que regresen a sus centros de trabajo y aún así, el acoso laboral continúa.
Tal es el caso de una psicóloga de un Centro de Atención Primaria en Adicciones (CAPA), quien lamentó que como parte del sistemático acoso laboral, la dependencia expuso sus datos personales a un medio de comunicación, violando la Ley General de Protección de Datos Personales en Posesión de Sujetos Obligados.
Explicó que la SSY filtró su número de afiliación al Issste y las enfermedades que padece, información personal que fue publicada en el Diario de Yucatán, lo cual es considerado un delito. Además, en dicho periódico la calumniaron al tacharla de “mentirosa” y “tramposa”.
En entrevista para Haz Ruido, relató que padece asma con marcha atópica, por lo que en marzo, al inicio de la contingencia, presentó ante la SSY las constancias médicas de especialistas que acreditaban su condición de salud y, basándose en el decreto presidencial, solicitó licencia.
Eso sí, durante todos estos meses no ha dejado de trabajar, pues desde su casa realiza consultas a sus pacientes vía telefónica, labor que reporta semanalmente a sus superiores con pruebas.
A principios de agosto, la Secretaría mandató a los mil 800 trabajadores de salud que están de licencia que se reincorporen a sus centros de trabajo, a pesar de que el decreto presidencial se extendió hasta octubre. Esta situación preocupó a muchos, pues al padecer comorbilidades corren el riesgo de contagiarse y morir de Covid-19.
“Lo peor es que nos pidieron regresar de forma arbitraria y no por medios oficiales, pues fue a través de WhatsApp, con capturas de pantalla de un anuncio en Facebook, no lo hicieron por escrito ni de forma legal. Además, nos dijeron que lleváramos un diagnóstico actualizado de nuestras enfermedades. A pesar de que entregué la constancia, me pidieron que me reincorpore porque según no cumplo los requisitos; no les importó que tengo un documento del Issste que comprueba que soy una persona en riesgo, amenazaron con sancionarme”, abundó.
Por tal razón, para proteger su salud, la mujer recurrió a un juez federal y se amparó. En represalia, la SSY exhibió sus datos personales que fueron publicados en el mencionado medio comunicación.
“Es una clara violación a mis derechos humanos, exhibieron mis enfermedades, mi adscripción, mi filiación de seguridad social, todo eso pone en riesgo mi seguridad. Fue una artimaña con la que me difamaron, a pesar de que un juez estableció que no hice trampa para pedir licencia y acreditó mi condición de salud. ¡No estoy en mi casa de floja”, declaró.
La trabajadora indicó que, tras estas agresiones, acoso laboral y violación a sus datos personales, procederá jurídicamente en contra de la dependencia estatal y del medio de comunicación, pues la intención es sentar un precedente para evitar que vuelvan a ocurrir estas arbitrariedades.
No hay manera de defenderse ante la muerte
Gerardo es citotecnologo en Ginecología en el Hospital Agustín O´Horán, padece diversas comorbilidades y debido al área en la que labora, corre el riesgo de contagiarse. Por eso pidió licencia y actualmente, ante el acoso laboral de la SSY, también se amparó.
“Laboro en un área altamente infecto-contagiosa, la de anatomía patológica, por eso cuando empezó la contingencia solicité que me entregaran un equipo de protección y la respuesta que me dieron fue “de algo nos vamos a morir”. Yo sin protección no le entro, este virus es serio, nuevo y altamente contagioso, no me voy a arriesgar”, explicó.
A él igual le solicitaron su reincorporación a través de un mensaje de WhatsApp, con mucha premura e irregularidades. Le avisaron el viernes 7 de agosto que tenía que presentar su constancia médica actualizada el lunes 10, lo cual era totalmente imposible.
“Para adquirirla, primero tengo que ir al médico general, quien me remitiría al especialista. Él me haría los estudios y ya luego dictamina, proceso que tarda varios días. Por si fuera poco, el hospital del Issste, en donde se solicitan esos certificados, está habilitado para atender a pacientes Covid, por lo que difícilmente me atenderían rápido. Fue entonces que recurrí a una juez y me emitió un amparo provisional”, explicó.
Dijo que cuando la SSY ordenó que se presentara, le estaba pidiendo que llevara el diagnóstico en el que se especificaran las enfermedades que padece, lo que es violatorio a su confidencialidad.
Gerardo reconoció que como se amparó, quizás en el futuro haya desagravios en su contra. “Ante el temor de las represalias, te puedes defender jurídicamente, pero ante el temor de la muerte, no hay manera de defenderse”, recalcó.
Relató que a pesar del amparo, hace poco personal del área jurídica de la SSY le llamó para notificarle de forma prepotente que tenía que presentarse a trabajar, por lo que lamentó ese hostigamiento y que las autoridades no entiendan que tienen que obedecer el mandato judicial.
“Sé que estoy amparado, por eso no voy a ir; si pesco el virus no habrá manera alguna de que la autoridad judicial o de salud puedan reparar el daño, pues moriré”, aseguró.
El afectado declaró que la SSY está actuando de forma criminal en contra de sus trabajadores, pues no existen las condiciones necesarias para regresar a laborar y, a pesar de eso, continúan los acosos y las difamaciones.
“Muy pocos lograron ampararse, pues no todos tienen dos mil o cinco mi pesos para pagarle a un abogado. Ahora, a cientos de trabajadores que tienen comorbilidades los obligaron a regresar, exponiendo sus vidas. Ojalá y no suceda, pero seguramente habrá compañeros que morirán de Covid porque no pudieron tramitar un amparo”, finalizó.