Se fracturó la rodilla en el mercado, ahora debe 40 mil pesos
Doña Catalina se lesionó al resbalar con un tapate sanitizante en el mercado de Oxkutzcab y el alcalde no se hizo responsable. Tiene que juntar dinero para pagar la deuda por la operación.
Por Claudia Arriaga
Mérida, Yucatán, 20 de agosto de 2020.- Catalina Canché se fracturó la rodilla con un tapete sanitizante colocado a la entrada del mercado principal de Oxkutzcab. Ella no ha sido la única víctima, varias personas se habían caído antes y reportado que era un riesgo. El problema no ha sido seguir las medidas sanitarias, sino que el líquido y material son resbalosos.
El accidente ocurrió el 10 de agosto cuando fue a dicho sitio para hacer sus compras. “Me dijo el muchacho que me iba a checar, me dio el gel y dijo que podía pasar, cuando pisé esa cosa que tienen puesto, me resbalé y me fui hincada, sentí que se reventó mi pie”, relató.
La intentaron llevar a la clínica del Seguro Social, pero no accedió por temor a contagiarse de Covid-19. Además, en caso de que no hubiera lugar, la habrían enviado al Hospital Agustín O´Horán en Mérida, donde correría más riesgo de enfermar.
Ya en casa, su esposo el señor Gilmer Cauich fue por una persona para que la revisara, pero no había nada que hacer. Fue entonces que, entre el temor al Covid-19 y la urgencia, Catalina acudió a una nosocomio privado del municipio, en donde le confirmaron la lesión y que tenían que intervenirla quirúrgicamente.
“No me quedó de otra, me tomaron la placa y preguntó mi esposo cuánto sale y pues nos cobraron 40 mil. Le pregunté qué vamos a hacer, y por suerte mi vecina me ofreció prestarme 25 mil y otro señor 15 mil, lo tuvimos que aceptar porque si no pagas, no te operan”, relató.
Para la pareja no existía otra forma de juntar el dinero, don Gilmer maneja un triciclo en el que lleva pasaje y al día gana menos de 80 pesos, pues cada vez menos personas usan sus servicios. “La gente ya no sale por la enfermedad”, señaló Catalina.
También buscaron la ayuda del presidente municipal de Oxkutzcab, Raúl Antonio Romero Chel, quien, evadiendo la responsabilidad del accidente, tan solo les dió tres mil pesos.
Doña Catalina se animó a dar a conocer su caso con la esperanza de juntar el faltante y pagar la deuda. Sin embargo, es consciente de las críticas que ha recibido.
“La gente dijo ‘¿por qué esa viejita sale a comprar?’, pero lo que no saben es que si salgo es porque estoy sola y ni modo, tengo que hacerlo”, lamentó.
A sus 61 años de edad, Catalina, aunque postrada en una cama, se siente fuerte y con ánimos de seguir adelante y espera que las personas puedan ayudarla para cerrar este capítulo.
**Si deseas comunicarte directamente con doña Catalina, puedes hacerlo marcando al celular 997 142 6475 y si deseas donar el número de tarjeta es 5579 1002 5686 6847 de Santander.