Pudo más el ego y se ultrajó la esencia de la Plaza Grande
Con la colocación de bancas de concreto, surge de nuevo la polémica por la remodelación de ese espacio público.
La exsecretaria de Cultura, Érica Millet, señaló que esta intervención es vulgar y un agravio, porque no se toma en cuenta la fisionomía, la tradición y la historia de un espacio emblemático.
Por Herbeth Escalante
Mérida, Yucatán, 13 de agosto de 2024.-Al darse a conocer que se colocarán bancas de concreto en vez de las tradicionales verdes de madera en la Plaza Grande, nuevamente surgió la polémica en redes sociales por la remodelación que realiza ahí el Gobierno del Estado, no solo por la opacidad de la obra, sino porque no se toma en cuenta la esencia histórica de ese espacio público.
Una de las críticas más férreas es la exsecretaria de la Cultura y las Artes, Érica Millet Corona, quien a través de su cuenta personal de X (antes Twitter), declaró que es escandaloso y perturbador que el gobernador Mauricio Vila Dosal se sienta con el derecho de intervenir de una manera tan vulgar un lugar tan entrañable.
“No creo que ninguno de quienes hemos habitado esos espacios apreciemos de manera positiva su ego desparramado sobre el espacio público”, abundó.
Posteriormente en entrevista para Haz Ruido, la promotora cultural lamentó la forma en la que se realiza el proyecto de remodelación de la Plaza Grande, pues si bien se anunció a principios de año, se hizo de forma opaca, sin dar a conocer a profundidad en qué consistía.
Agregó que se hizo con renders engañosos y sin una estrategia de socialización porque las autoridades estatales no querían levantar polémica ni les interesaba el diálogo. Dijo que es lamentable, sobre todo la tala del arbolado del lugar, y que se confunde modernidad con progreso.
Señaló que esta remodelación es un agravio porque no se toma en cuenta la fisionomía, la tradición y la historia de un espacio emblemático, además de que se ultraja su esencia sin miramientos.
“Y esto dice mucho del estilo autoritario de liderazgo del que ya teníamos idea (de Mauricio Vila). Nuevamente se maneja lo que es de todos como una empresa en la que hay una sola visión, y quien debiera cuidar el patrimonio, dispone de él de acuerdo con su visión unilateral”, apuntó.
Érica Millet también lamentó la tibieza del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) ante esta intervención, ya que por mucho menos ha realizado clausuras y amonestaciones en el Centro Histórico de Mérida.
Al preguntarle su opinión sobre las nuevas bancas de concreto que se colocarán, indicó que si bien no es urbanista, de manera personal considera que es un desatino porque rompen con la fisionomía tradicional de la Plaza Grande, de la que muchos se sienten orgullosos.
Agregó que no tardarán en verse sucias y todo porque se está quitando un elemento que distinguía a ese espacio público, para copiar lo que hay en otras partes.
Cabe mencionar que en redes sociales se advirtió que con este tipo de bancas de concreto la gente ya no se podrá sentar porque se calentarán con las altas temperaturas de Yucatán, por lo que debieron conservarse las de madera que distinguían a la Plaza Grande.
Sin embargo, de acuerdo con información consultada a las autoridades estatales, esas bancas cuentan con un recubrimiento que absorberá el calor, por lo tanto, no deben calentarse.
Sobre la decisión de no volver a colocar las bancas verdes de madera, se informó que éstas se rompían constantemente, por lo que tenían que ser reparadas a cada rato.
De igual manera se precisó que regresarán las famosas bancas de confidentes a la Plaza Grande.