Protestan contra la ley seca, están quebrados
Aseguran que esta medida del gobierno del Estado provocó clandestinaje, acoso policiaco, pérdidas económicas y quiebre de negocios.
Por Claudia Arriaga
Mérida, Yucatán, 15 de agosto de 2020.-Clandestinaje, acoso policiaco y pérdidas económicas, son algunas de las repercusiones de la ley seca en Yucatán, lo que motivó a una protesta este sábado en frente del Palacio de Gobierno.
Más de 30 personas dueñas de expendios de cerveza, restaurantes y bares acudieron a manifestar su inconformidad contra la extensión de esta medida que, según las autoridades, sirve para evitar contagios de Covid-19.
Uno de los inconformes, de nombre Omar Herrera, se sumó a la convocatoria que vio en redes sociales, pues tiene dos años con una agencia de cervezas y en temporadas de vacaciones generaba ganancias de hasta 30 mil pesos y sus empleados se iban a casa con 600 pesos por día. Ahora, su situación económica es adversa.
Además, aunque la cervecera lo apoya surtiéndole cervezas sin alcohol, la policía lo ha hostigado para que deje de venderlas. “La policía como que no lee, porque si te ven vendiendo cerveza cero te mete preso. A mi local ya fueron tres unidades de la Policía Municipal para hostigarme… ni siquiera si reporto un robo llegan tantos”, relató.
Para Guadalupe Ek Chi, la ley seca representó el quiebre de su negocio, un bar que apenas tenía seis meses de haber abierto. Ocho meseros, dos cocineros, un músico y un cajero dependían de su local.
“Si yo tuviera años con el negocio tendría para pagarles, pero no puedo, y si levantan la ley seca no tengo ni qué vender”, explicó.
Agregó que para reabrir la primera ocasión, Guadalupe invirtió 7 mil pesos en insumos de limpieza, entre tapete sanitizante, productos desechables, termómetro y gel antibacterial, pero ahora todo se vino abajo.
Finalmente, Jorge Alberto Reyes reprochó que en Oxkutzcab le recogieron toda su mercancía de la agencia y junto con otros colegas aseguró que existió un acuerdo del alcalde del municipio y el gobierno para repartirla a los clandestinos.
“Da la casualidad que a nosotros sí nos cuida la policía y se quedan hasta la madrugada, los hemos seguido y hemos visto que reparten cerveza a los clandestinos en Oxkutzcab. Tenemos la ubicación exacta de donde se vende”, acusó.