Posaron para sesiones fotográficas, ahora las exhiben como objetos
Decenas de mujeres, incluidas menores de edad, aceptaron posar para el fotógrafo Alberto Euán. Tiempo después, las imágenes fueron vendidas a un sitio web pornográfico en donde son exhibidas y hostigadas.
Por Claudia Arriaga
Mérida, Yucatán, 9 de diciembre de 2019.- Sofía tenía 16 años la primera vez que aceptó posar para una sesión fotográfica, confío en la promesa de que el material no sería utilizado para otros fines. Ella es una de las más de 90 mujeres que forman parte de una lista de víctimas de Yucatán cuyas imágenes son expuestas en el portal de pornografía Packs de México.
Las fotografías son de la autoría de Alberto Euán, quien es acusado por los administradores del sitio web de vender los contenidos íntimos sin el consentimiento de las jóvenes.
Sofía ya es mayor de edad y narró como intentó interponer una denuncia ante la Fiscalía General del Estado (FGE) en contra de Euán, sin embargo, no se lo permitieron.
“Intenté, junto con otras chicas que estaban en la lista, interponer una denuncia, nos dicen que no podíamos hacerlo porque no había evidencia, tenían que estar las fotos en la página, un simple nombre de una lista no era suficiente”, señaló.
Reconoce que cuando accedió a ser fotografiada era una niña fácil de engañar. “Yo tenía 16 años cuando lo conocí y él me dijo que fuera a hacer una sesión, era muy fácil engañarme, era una niña con baja autoestima. Me pedía tener relaciones sexuales, me preguntaba cuánto cobraba”, indicó.
También confesó que a esa edad es difícil percatarse de los peligros de aceptar y admite que en ocasiones incluso le seguía el juego. “Yo sentía confianza porque estaban su mamá y su novia presentes cuando me hacia las fotos”, dijo.
Otra de las víctimas es Eugenia, quien desde hace más de tres años no tiene contacto con Alberto Euán. Ella siempre recordará el miedo que sintió cuando su nombre fue publicado en la lista de las mujeres que serían exhibidas en el mencionado sitio.
“Todo este tiempo tuve la esperanza de que nunca fueran publicadas mis fotos, que estaban en esa lista nada más y que no iba a pasar. Nunca le hablé para reclamarle porque sentía que no hacía nada, quería que sea directo con las autoridades”, puntualizó.
Al igual que a Sofía, la FGE no le permitió interponer la demanda. “Quisimos, pero no se pudo porque no había pruebas suficientes; el procedimiento se me hace deficiente, dijeron que por lo menos en el caso de la página no se puede hacer nada ya que los servidores no son mexicanos”, agregó.
Ella también recibió mensajes inapropiados y proposiciones sexuales de Euán. “Me decía ven a mi casa y hacemos cosas, quiero tener relaciones contigo, verte desnuda, mándame una foto. Empecé a notar que eso no era adecuado y menos para alguien que dice ser profesional”, lamentó.
Para Eugenia el problema no es que sus fotos sean exhibidas, sino que sea usada como un objeto. “A mí no me dolió que mis fotos se vean, el problema era que se me rebajaba como un objeto vendible, era mi mayor enojo y frustración. Mi cuerpo era un objeto que prácticamente no valía nada”, sostiene.
Entrevistado sobre estas acusaciones, Alberto Euán declaró que se enteró la noche del 5 de julio que las imágenes que tomó estaban en el sitio pornográfico, por lo que acudió a la Fiscalía para interponer la denuncia correspondiente.
“Yo nunca he vendido mis sesiones, acudí el sábado por la mañana a denunciar por robo de información sensible y difamación contra quien resulté responsable. Se están publicando fotos de mi autoría sin mi consentimiento y el de las modelos”, se excusó.
Sus equipos también le fueron requeridos por la policía cibernética para descartar o comprobar si fue un “hackeo” físico y “phishing” detectable; también le solicitaron los accesos a sus cuentas de redes sociales activas.
Cabe mencionar que el administrador de la página Packs de México, en una entrevista realizada vía correo electrónico, responsabiliza a Euán de vender las sesiones.
“En el caso de Alberto Euán, nuestro contacto lo obtuvo directo de un amigo de él, la información que nos dio es la siguiente: El fotógrafo debido a problemas económicos, empezó a vender las sesiones de sus modelos”, precisó en la entrevista.
“Únicamente se lo vendía a personas cercanas a él, un círculo cerrado, pero, como siempre pasa, se filtró, así fue como obtuvo el material y nuestro contacto nos lo vendió a nosotros”, recalcó.
Cabe recordar que en 2018 se reformó el Código Penal del Estado de Yucatán para reconocer el delito contra la imagen personal o “pornovenganza” para sancionar la difusión de fotografías, videos o audio con contenido sexual sin el consentimiento de la otra persona.
El cambio al Código de poco ha servido ya que, de enero a julio de 2019, se han interpuesto 41 denuncias por este delito en Yucatán, según información de la Fiscalía, pero ninguna persona ha sido procesada por este cargo.
Packs de México es la segunda red de pornografía que opera en el estado, la primera fue desmantelada en 2016, se llamó Yucatercos.