Obligan a mujeres indígenas a pedir disculpas por protestar contra el Tren Maya
La empresa interpuso una denuncia penal en contra de las pobladoras de Citilcum, por lo que ellas tuvieron que firmar un documento en el que se comprometen a no volver a protestar.
Con información de Pedro Uitz
Izamal, Yucatán, 30 de julio de 2024.-Cuatro mujeres y un hombre mayas de la comisaría de Citilcum en Izamal, fueron obligadas a pedir disculpas públicas y comprometerse a no volver a protestar en contra de la construcción del Tren Maya, pues de lo contrario, seguiría el trámite de una denuncia penal interpuesta en su contra.
Dichas madres de familia protestaron el pasado 18 de mayo para solicitar a las autoridades federales que reubiquen la escuela primaria a la que acuden sus hijos, llamada “Manuel Rodríguez Acosta” en el turno matutino y “Benito Juárez“ en el vespertino, debido a las complicaciones para llegar hasta ahí tras la construcción de dicho ferrocarril.
En esa manifestación, las mujeres se quejaban de que no se terminó de construir un paso a desnivel debajo del puente del Tren Maya, el cual prácticamente es un túnel, por lo que se les dificultaba caminar por ahí para llevar a sus hijos al plantel educativo.
Explicaron que debido al Tren Maya, la escuela quedó del otro lado de su comunidad, en el pueblo de Kimbilá, por lo que pidieron que sea reubicada en Citilcum y que se finalice la construcción del paso peatonal. Además, en otras ocasiones se quejaron del polvo que generaba la obra y que perjudicaba a sus hijos.
Pero en vez de atender sus demandas, autoridades de la empresa Tren Maya interpusieron una denuncia penal en su contra ante la Fiscalía General de la República (FGR), asentada en el expediente FED/YUC/MER/0000270/2024, por el presunto delito de obstrucción de las vías de comunicación federales.
Las pobladoras fueron notificadas de la denuncia el pasado 19 de junio, por lo que temerosas de las represalias o que incluso sean encarceladas, aceptaron llegar a un acuerdo: Pedir una disculpa pública al Tren Maya.
Finalmente, este martes las y el denunciado se presentaron en la oficina del comisario municipal, Manuel Jesús Chan Rabell, en donde se comprometieron a que “esos actos no se vuelvan a producir en perjuicio de la empresa y sus usuarios”. Es decir, prácticamente las obligaron a no volver a protestar.
Con la firma del «documento de disculpa», la empresa Tren Maya también se desistió de ejercer cualquier otra acción penal o reclamo en contra de esas mujeres indígenas.
Eso sí, en el documento, esa compañía de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedema) “reconoce como válida las acciones que llevaron a las madres de familia a plantear las demandas de reubicar la escuela donde estudian sus hijos”.
Por parte del Tren Maya firmaron ese documento Rosalio Aguilar Jiménez, encargado de la Coordinación General Jurídica Contenciosa, y Arturo Chab Cárdenas, director Jurídico de lo Contencioso. Este último, por cierto, fue delegado del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) en Yucatán.