Mayas domesticaron y comercializaron perros y otras especies
Los estudios arqueológicos sobre los procesos de domesticación de animales y plantas en la región maya nos permiten conocer las redes de comercialización en la época prehispánica y, entender nuestra alimentación actual.
Y precisamente la domesticación será el tema central del ArqueoFest, el primero de su tipo en el país enfocado a niñas y niños, para que se interesen y acerquen a la Arqueología.
Por Herbeth Escalante
Mérida, Yucatán, 12 de noviembre de 2019.- Los estudios arqueológicos sobre los procesos de domesticación de animales y plantas en la región maya, nos permiten conocer las redes de comercialización en la época prehispánica y, entender nuestra alimentación actual, señaló la doctora Nayeli Jiménez Cano, investigadora de la Facultad de Antropología, al invitar al público al “ArqueoFest: la historia de la domesticación”.
En entrevista, señaló que estos procesos son muy largos que implican cambios morfológicos y genéticos de especies ocasionados por el hombre, ya que las utilizaban para su beneficio.
Indicó que desde la arqueología, han podido identificar evidencias importantes de domesticación de animales en el área maya -como el perro, que era empleado incluso para banquetes rituales- y que jugaron un papel importante en la comercialización con otras regiones de Mesoamérica.
Tal es el caso del perro maya, pero también hubo presencia del xoloitzcuintle, que como se sabe es un can pelón, y de los tlachichis, ejemplares con patas cortas que son parientes muy antiguos de los chihuahua.
“El papel que tenía el mejor amigo del hombre en la época prehispánica es muy distinto al de ahora, algunos perros eran utilizados en banquetes rituales, ya que los alimentaban durante mucho tiempo y luego eran consumidos. Otros eran usados como mascotas y también servían para la cacería de venado, actividad que hoy todavía se hace en algunas comunidades de Yucatán”, explicó la arqueóloga Jiménez Cano.
Otra especie domesticada, de la cual todavía nos alimentamos, es el pavo, que proviene del centro del país y que llegó a las ciudades mayas a través del comercio. Sus huesos también sirvieron para fabricar herramientas y flautas, por ejemplo.
En cuanto a plantas, se han hecho estudios de los procesos de domesticación del maíz y el cacao, que nos ayudan a entender nuestra propia alimentación actual.
“Y también podemos compararlo con el pasado, con la Arqueología encontramos que esa domesticación nos habla de una organización social mucha más elevada en la civilización maya”, declaró la investigadora de la Universidad Autonóma de Yucatán (UADY).
Este tema será abordado en el ArqueoFest, evento de divulgación de la ciencia financiado por el Conacyt y que está dirigido principalmente a niñas y niños, para que se interesen en la ciencia arqueológica y conozcan más de la historia de nuestro entorno.
En esta jornada, se impartirá el taller didáctico “Juegos y atole: los secretos de las plantas”, en el que las y los menores podrán elaborar sus propias bebidas a base de cacao. También “Ciencia hasta los huesos: los animales”, para elaborar instrumentos y tocar música prehispánica; y “Arte-fashion prehispánico”, para adornar, decorar y fabricar sus propias herramientas.
La doctora señaló que este festival, el primero de su tipo en el país enfocado al público infantil, será una oportunidad para conocer el trabajo de las y los arqueólogos en el laboratorio, “lo que hacemos después de nuestras salidas a campo y los hallazgos de las excavaciones”
El ArqueoFest se realizará el sábado 16 de noviembre, de 10 de la mañana a las 4 de la tarde, en el Jardín Botánico Lakinil Hó del Parque Recreativo de Oriente, en el Fraccionamiento del Parque, que iniciará con la leyenda performance “La caza del venado”.
En su organización también participan la Facultad de Antropología, la subdirección de Patrimonio Cultural de la Dirección de Desarrollo Urbano del Ayuntamiento de Mérida y la Asociación Yucateca de Especialistas en Restauración y Conservación del Patrimonio Edificado (Ayerac).