Marilyn fue víctima de violencia psicológica; sospechan que no cometió suicidio
La Fiscalía no les permite leer la carpeta de investigación, además levantó sus pertenencias como celular y computadora portátil. Ella presentaba marcas de violencia en las manos. Exigen que se investigue al hombre con el que tenía una relación
Por Claudia Arriaga
Mérida, Yucatán, 15 de febrero del 2021.-El pasado 7 de febrero, Marilyn de Fátima Mena Irigoyen, de 33 años de edad, fue encontrada sin vida en su departamento. Una amiga de la joven sospechó que algo no estaba bien con ella y alertó a su madre Marilyn Irigoyen Suárez y a su hermano Pedro Alberto, quienes ingresaron al lugar con ayuda de los policías de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP).
La joven aparentemente cometió suicidio, pero la familia está segura que detrás existe un autor intelectual, que podría haberla inducido a tomar esa decisión o algo peor, ser su feminicida. Se trata de Ricardo P. A., quien desde el 2011 inició una relación afectiva con Marilyn. Además, los vecinos confirmaron que los escucharon discutir a gritos el viernes.
“Al no tener información de ella el fin de semana, fuimos a averiguar con los vecinos, quienes nos dijeron que Ricardo P.A. fue el domingo por la mañana a verla y al no tener respuesta brincó la barda y habló a su departamento. Lo sospechoso es que también les preguntó a los vecinos de al lado si no llegó una ambulancia. A mi parecer me suena a que, si discutieron viernes y estuvieron en contacto el sábado, tal vez hubo un antecedente de que ella tomaría esa decisión y él ya sabía. Si la quería ¿por qué no le avisó a la familia?”, lamentó su hermano Pedro.
Al departamento llegó el Servicio Médico Forense (Semefo) y unos agentes que dijeron ser parte de la unidad de Feminicidios de la Fiscalía. A las 5 de la tarde del domingo levantaron el cuerpo, la autopsia se realizó ese mismo día alrededor de las 6:38 pm y el lunes les informaron que la causa de la muerte fue por asfixia mecánica por ahorcamiento.
Sin embargo, no les permitieron leer el expediente, además la Fiscalía aseguró el departamento en un lapso de seis meses a un año y levantaron las pertenencias como celular y computadora portátil. Por lo que su madre, la señora Marilyn Irigoyen interpuso la denuncia 18/2021 para exigir se investigue qué fue lo que pasó.
“Descubrimos marcas en las manos de mi prima que no concuerdan, tiene lastimados los dedos. No se le hizo la prueba toxicológica porque la sangre estaba hemolizada, pero sabemos que hay otras formas. Nos la entregaron en menos de 24 horas, la revisión del departamento tardó muchas horas. Nunca nos permitieron ver el departamento para saber si faltaba algo. Luego en la agencia de Feminicidios me muestran la carpeta de investigación, pero no me dejó leerla. Y si dicen que fue ahorcamiento mecánico ¿por qué quedarse las pertenencias de mi prima y el departamento de seis meses a un año?”, comentó Cinthia Elena Irigoyen Irigoyen, prima de la joven.
Durante los años que estuvo Marilyn con Ricardo P.A. vivió maltrato psicológico y emocional, de hecho, sus amistades cercanas están dispuestos a testificar sobre eso. Y existe evidencia como capturas de pantalla de conversaciones entre la pareja y audios de llamadas en las que se nota el control que él ejercía sobre la joven.
El mayor temor de esta familia es que este sujeto tiene influencias políticas, pues es hermano de un senador del Partido Acción Nacional (PAN), y tiene nexos directos con las autoridades en turno, pues al parecer es funcionario.
Su madre, la señora Marilyn Irigoyen Suárez está convencida de que su hija no cometió suicidio. “Ella no tenía en mente hacer eso, estaba haciendo planes para su cumpleaños del 7 de marzo, estaba contenta y feliz. Era muy alegre y llena de vida”, recordó.
La relación de la joven con Ricardo era abierta, él es un hombre casado y tiene un hijo, y aunque ella intentó terminar definitivamente, existen pruebas de que nunca dejó de hostigarla o presionarla cuando intentaba entablar una relación nueva con otra persona.
Marilyn le había manifestado a su prima que ya estaba cansada de la situación con este sujeto, quien a toda costa le impedía ser feliz y plena con alguien más.
“Creo que sí deberían checar la información que hay en su celular y también lo que saben sus amistades, tengo una llamada de media hora en el que el maltrato psicológico es evidente. Si pido a las autoridades que no se deje el caso, no es un caso aislado de suicidio, ella jamás fue de pensar en hacerlo, teníamos un antecedente con un familiar y ella incluso la regañó. Marilyn era una persona llena de vida”, explicó Cinthia.
Tan solo en el 2020, el Observatorio Ciudadano Nacional del Feminicidio en Yucatán documento 29 suicidios de mujeres en los que existe la sospecha de que en realidad fueron feminicidios. Se han reabierto dos carpetas de investigación a solicitud de las familias.