La Codhey informó que del 2018 a la fecha ha documentado 22 fallecimientos de personas detenidas y en custodia de autoridades policiacas en Yucatán. Algunos casos fueron suicidios en cárceles públicas, otros se investigan como homicidios.

Por Redacción

Mérida, Yucatán, 17 de noviembre de 2020.-La Comisión de Derechos Humanos del Estado de Yucatán (Codhey) informó que del 2018 a la fecha ha documentado  22 fallecimientos de personas detenidas y en custodia de autoridades policiacas municipales y estatales, de los cuales, 10 ocurrieron este año.

El organismo indicó que dieron seguimiento a estos casos a través de procesos de quejas, y que los decesos se atribuyen a diversas causas, entre ellas el suicidio en cárceles municipales, aunque también se investigan homicidios.

En el año de 2018, abundó la Comisión, se registraron ocho fallecimientos, siete bajo la responsabilidad de autoridades municipales y uno de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP).

En 2019, fueron cuatro casos, tres bajo la tutela de policías municipales y uno de la autoridad estatal, recalcó la Codhey.

Y en 2020, se tiene el registro al mes de noviembre, de 10 fallecimientos, de los cuales seis corresponden a corporaciones municipales y cuatro a la Policía estatal.

Como hemos informado en Haz Ruido, entre los casos más lamentables destaca el de   Gaspar Sulub Cimé, ocurrido en febrero, quien supuestamente murió de un infarto en una patrulla de la SSP, pero luego una necropsia privada arrojó que en realidad fue torturado.

En abril sucedió otro lamentable hecho, pero en el que estuvo envuelta la Policía Municipal de Chacsinkin. Un poblador de nombre Ronald Richmond Díaz fue hallado muerto y con signos de tortura en los montes de esa comunidad, horas después de ser detenido. En un principio, la corporación indicó que se trató de un suicidio, pero una autopsia reveló que fue asesinado.

En octubre, indignó el caso  de José Santiago Medina Naal, un hombre con discapacidad intelectual que fue arrestado por policías estatales y luego su cuerpo sin vida apareció en la carretera a Sisal.

Y a principios de noviembre, impactó la muerte de Salvador Osmar López Manzanilla, detenido por agentes de la SSP en un retén de Chicxulub Puerto, quienes lo habrían torturado. Actualmente, cuatro uniformados están en prisión preventiva y ayer fueron vinculados a proceso por este crimen.

Tras estos lamentables casos, la Codhey reiteró que todas las personas que se encuentran detenidas quedan bajo responsabilidad de las autoridades que los tengan en resguardo.

Por tal razón, hizo un llamado a los elementos de las Policías estatales y municipales a seguir los protocolos establecidos en las corporaciones, a fin de garantizar la integridad y la vida de las personas durante el tiempo que estén bajo su resguardo y responsabilidad.

Fiscalía niega homicidio en dos casos

Sobre la información proporcionada por la Codhey, la Fiscalía General del Estado envió un comunicado para recalcar que “ha dado puntual seguimiento” a las indagatorias relacionadas con el deceso de personas detenidas que, en su momento, sus respectivas  familias denunciaron que estaban involucrados agentes policiacos.

Con respecto a la muerte de Ronald Wayne Richmond, cuyo cuerpo fue encontrado en montes de Chacsinkín el pasado mes de abril, y de Gaspar Avelino Sulub Cimé registrada durante el mes de febrero en Progreso, descartó la existencia de algún delito en ambos hechos. 

En lo concerniente al caso en Chacsinkín, dijo que especialistas del Instituto de Ciencias Forenses de la Fiscalía practicaron la necropsia de ley y, con base en los indicios encontrados en el cadáver, determinaron que la causa de la muerte se debió a una asfixia mecánica por ahorcamiento, es decir, se suicidó,  dictamen que fue confirmado por la Fiscalía General de la República (FGR).

En el segundo caso citado, indicó que especialistas de la Fiscalía General de Campeche ratificaron el resultado de la necropsia practicada por el Semefo de Yucatán, asegurando que la causa de muerte del progreseño fue asfixia mecánica por oclusión aérea, “con lo que se descarta que se tratara de un homicidio”. 

Los hechos emanan de la carpeta de investigación H1-3/2020, abierta por la Fiscalía General del Estado, luego de que el hoy occiso falleciera cuando era trasladado en una patrulla. 

Ante la inconformidad por el resultado de la necropsia oficial practicada, los familiares del occiso contrataron los servicios de un doctor particular para la realización de un segundo estudio pericial. 

En esa segunda necropsia, el citado médico particular afirma que “la causa de muerte del señor Gaspar Sulub Cimé fue traumatismo craneoencefálico y que sufrió una asfixia por broncoaspiración de tejido hemático” y concluye “que sufrió tortura”. 

Ante esa discrepancia y a fin de esclarecer la causa de muerte, el órgano investigador solicitó a la Fiscalía de Campeche que emita una opinión médica en relación con los protocolos de necropsia realizados.  Para ello, proporcionaron fotografías, videograbaciones y la información requerida sobre el particular. 

El dictamen emitido por peritos de la Fiscalía de Campeche concluyó tras el análisis de los dictámenes en discrepancia, que no se cuenta con evidencia franca que permita determinar que la causa de la muerte haya sido por un traumatismo craneoencefálico severo, toda vez que no hay reporte en ninguna de las dos necropsias realizadas, trazos de fractura en bóveda craneana, ni en piso anterior, medio y posterior de cráneo, ni de macizo facial”, ratificándose así los resultados de la necropsia emitidos por los peritos de la Fiscalía de Yucatán. 

Tras estos resultados, las agencias investigadoras que tienen a su cargo ambas carpetas darán seguimiento puntual y jurídico a su determinación, conforme a Derecho, recalcó la Fiscalía.