La homofobia en Mérida cambió de los golpes a los rosarios
En su libro “Mérida Gay, crónicas de los movimientos LGBTTT (1960-2014)”, el periodista German Pasos Tzec documentó la homofobia de la alta elite, las razzias policiacas y el trabajo de los activistas.
“Las fiestas se hacían de manera clandestina para evitar agresiones, ahorita ya cambió, hay represión de otro tipo; por ejemplo, los diputados que responden a los grupos conservadores para no aprobar el matrimonio igualitario”, sentenció.
Por Claudia Arriaga
Mérida, Yucatán, 15 de junio del 2020.-En 40 años, la discriminación en Mérida hacia la comunidad de Lesbianas, Gays, Bisexuales y Transgénero (LGBT) se transformó de los golpes a los rosarios de grupos conservadores que se oponen a la igualdad de derechos.
Así lo ha documentado Germán Pasos Tzec, periodista y escritor del libro “Mérida Gay, crónicas de los movimientos LGBTTT (1960-2014)”, quien ha vivido estos actos de homofobia en carne propia.
En su libro da cuenta de un pasado poco conocido, pero que existió. La Mérida homofóbica que incomoda, conformada por la “alta élite” en la que abundaban los políticos.
“Las fiestas se hacían de manera clandestina para evitar agresiones, ahorita ya cambió, hay represión de otro tipo; por ejemplo, los diputados que responden a los grupos conservadores para no aprobar el matrimonio igualitario”, sentenció Germán.
El doble rechazo al matrimonio igualitario evidencia que existen otros intereses por encima de respetar la Constitución de México y al artículo primero, el cual establece que todas las personas tienen igualdad de derechos.
“Mérida Gay”, es el segundo libro escrito por Germán y te invita a recorrer los detalles quizás más escandalosos para algunos, como la prostitución. Pero también concede la oportunidad de conocer los primeros pasos del activismo LGBT.
De igual forma, imprime un poco de Germán, a quien no se le da vivir con prejuicios, ni ahora ni nunca. La discriminación que vivió en la secundaría no tuvo el poder de cambiarlo.
“Me daba coraje que me empujen, que me hagan collazos, pero yo también los hacía. Jugábamos pesca pesca de collazos. Me daba coraje que me agredan o me digan “puto”, era como de relajo, pero yo me sentía mal”, explicó.
Su formación lo ayudó en aquellas épocas y salió adelante. Tuvo la suerte de trabajar desde pequeño y tener otra visión del mundo. Además, nunca le confesó a su mamá y papá que era gay, porque no creyó sea necesario.
“Mi familia me protegía, sabían que era débil, vulnerable. Yo no les decía “soy gay, protégeme”. Con mi papá y mi mamá no tuve problemas, con mis hermanos sí, me decían ‘te llevas con puro cangrejo’», recordó.
El primer trabajo de Germán que detonó su interés por estudiar al movimiento LGBTTT fue su tesis que realizó para la licenciatura de Antropología Social de la Universidad Autónoma de Yucatán (UADY). Se llama “Homosexualidad y Cultura: Una visión antropológica de la relación homosexual masculina en la ciudad de Mérida”, la cuál estuvo sometida a doble escrutinio, debido a que en los 90 era un tema polémico.
Desde entonces, ha documentado todo lo que enfrenta la comunidad LGBT de Mérida, incluso desde su perspectiva de periodista. Él formó parte del trabajo de los primeros grupos de activistas que lucharon por defender sus derechos y también vivió las razzias policíacas en carne propia, conoció los separos por salir a divertirse.
En la actualidad, declaró que confía en que son más las personas que están a favor del matrimonio igualitario y del cambio de identidad, de que las familias son diversas y que todos deben tener los mismos derechos y no ser discriminados.
“Yo creo que hay más gente que está de acuerdo con que la familia ya no es la familia monogámica patriarcal, creo somos más quienes reconocemos la diversidad”, sentenció Germán, quien en 2019 fue nombrado cronista vitalicio de la comunidad LGBTTT por la Red de Personas Afectadas con VIH (REPAVIH).
El libro “Mérida Gay” se encuentra disponible únicamente en versión electrónica a través de https://www.librosenred.com/autores/germanpasostzec.html