Intervienen monumento a Los Montejo y la Policía los rodea
Dos mujeres y un hombre se subieron a la estatua, desde donde gritaron que Mérida es racista y colonial. Permanecieron arriba cerca de tres horas y los policías pretendían detenerlos.
Los manifestantes también pidieron justicia por José Eduardo y expresaron su respaldo a la lucha de los pueblos mayas de Homún y Chablekal.
Por Herbeth Escalante / Fotografías de Lilia Balam
Mérida, Yucatan, 12 de octubre de 2021.- Un grupo de personas intervino el monumento a Los Montejo, en el marco del 12 de octubre, y tres de ellas se subieron para pintarlo. El director de la Policía Municipal, Mario Arturo Romero Escalante, al principio advirtió que serían detenidas porque cometieron “actos de vandalismo”, por lo que se vivieron momentos tensos.
Dos mujeres y un hombre vestidos con trajes autóctonos se subieron a la estatua y, con una soga, la amarraron, por lo que en ese momento agentes municipales y estatales rodearon la glorieta del Remate de Paseo de Montejo.
Además, los uniformados sometieron a otras dos mujeres que protestaban abajo, y les arrebataron sus pertenencias a los demás, incluidas sus bicicletas.
Tuvo que intervenir la activista Martha Capetillo, de Grupo Indignación, para evitar que se las lleven a la cárcel pública. Ella denunció que la jalaron, empujaron y patearon.
“Queremos que venga el alcalde Renán Barrera porque hay la intención de detener [a las otras tres personas] y esto está sucediendo en el contexto de una manifestación reiterada que él ha ignorado, a pesar de que desde hace tres administraciones prometió que haría una consulta sobre el destino de la estatua”, señaló.
Las personas que estaban arriba del monumento cantaron canciones en lengua indígena y recalcaron que la iconoclasia no es delito. De igual forma, pidieron la intervención de la Comisión de Derechos Humanos estatal (Codhey) para no ser arrestadas.
El resto de los manifestantes indicaron que tenían miedo de ser agredidos y que sus derechos sean violentados por los policías. De hecho, señalaron que fueron amenazados de que “serían cocinados y golpeados” por los agentes.
Previamente, plasmaron manos de color rojo en la base del monumento, en representación de la sangre derramada de los pueblos originarios durante la colonia
En el lugar se encontraba Romero Escalante, quien declaró que esperarían que los tres jóvenes se bajaran y que por eso les colocaron una escalera. Dijo que no se subirían por ellos para evitar accidentes.
Sostuvo que al escalar la estatua, dichas personas rompieron objetos y que eso “es vandalismo”, por lo que serían detenidas y presentadas ante un juez. Incluso, prometió que sus derechos no serían vulnerados. Cabe mencionar que casi todo el tiempo el comandante se la pasó hablando por teléfono y él mismo reconoció que mantenía informado de la situación al alcalde Renán Barrera.
Mientras tanto, desde lo alto, las y el manifestantes gritaron que Mérida es racista, blanca y colonial. Pidieron justicia por José Eduardo y manifestaron su respaldo a la lucha de los pueblos mayas de Homún y Chablekal.
Tres horas después, el jefe de la Policía Municipal ordenó a los uniformados que se retiraran de la glorieta y pidió a las y al manifestante que se bajaran del monumento. Sin embargo, los presentes temieron que hubiera represión, ya que las patrullas permanecían a pocos metros del lugar.
Romero Escalante de nuevo les pidió que descendieran y dio su palabra, ante los activistas, manifestantes y periodistas, que esos jóvenes no serían detenidos.
Al final, las mujeres y el hombre bajaron de la estatua de Los Montejo con ayuda de una soga y se subieron a un vehículo para alejarse del Remate.