Doña Ethel ya está en suelo yucateco
Poco después de las 9 de la noche aterrizó en el aeropuerto de Mérida el avión de la Fuerza Aérea Mexicana que rescató a la yucateca en Perú.
Debido a que se contagió de Covid-19, del aeropuerto fue trasladada a un hospital del ISSSTE para recibir atención médica.
Por Herbeth Escalante
Mérida, Yucatán, 30 de marzo de 2020.- Luego de varios días de desesperación, ansiedad y soledad, la señora Ethel Trujillo Trujillo regresó a Yucatán esta noche. Luego de casi ocho horas de vuelo desde Perú, el avión de la Fuerza Aérea Mexicana que la rescató por fin aterrizó en el aeropuerto internacional de Mérida.
Hace una semana, su esposo Isaías Rodríguez y Rodríguez falleció de coronavirus Covid-19 en Cusco y ella, quien también dio positivo a la enfermedad, fue aislada en un hotel de esa ciudad andina.
A solicitud de sus familiares, la Secretaría de Relaciones Exteriores realizó las gestiones necesarias con las autoridades peruanas para que un avión de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) volara este lunes hasta ahí e implementara un operativo de repatriación humanitaria bajo las disposiciones sanitarias de ambos países.
Poco después de las 9 de la noche, el avión Gulfstream G550 de la Fuerza Aérea Mexicana aterrizó en el aeropuerto de Mérida, bajo un discreto operativo de seguridad de las autoridades federales.
Dos ambulancias, de la Secretaría de Salud y de la Policía Federal, ingresaron a una de las pistas del aeropuerto con personal de salud usando trajes especiales para evitar el contagio.
Doña Ethel llegó encapsulada, es decir, con el cuerpo envuelto con un material médico porque es positiva a Covid-19, y tras el protocolo sanitario adecuado, fue trasladada al Hospital Regional del ISSSTE para recibir atención clínica.
Uno de sus hijos, Darío Rodríguez Trujillo, quien es médico, fue acreditado para recibir a la señora y acudió protegido como el personal de salud, de modo que pudo estar con su madre en la misma ambulancia durante el traslado al nosocomio.
Quizás uno de los momentos más emotivos de la llegada fue cuando Darío agradeció al piloto de la aeronave por haberla traído. “Gracias, capitán, es mi mamá”, exclamó.
(Fotos de Lorenzo Hernández)