Una de las víctimas encontró el teléfono en el consultorio, por lo que de inmediato borró los videos de ese día y presentó una denuncia en la Fiscalía.

Por Claudia Arriaga.

Mérida, Yucatán, 26 de abril del 2021.- Marcela del Carmen Pérez García acudió a una sesión de fisioterapia en el consultorio de Abraham Madrid y mientras se cambiaba de ropa descubrió un celular que la grababa. Por temor a ser agredida no confrontó al sujeto, pero si borró los videos de ese día.

“Ese día entré muy alerta y me percaté de la posición que tenía en el celular, mi sorpresa es que estaba grabando, borré la imagen del carrete. Me puse nerviosa y pensé que si me salía en ese momento se daría cuenta. Lo que hice fue borrar el carrete y me di cuenta que era un celular específico para eso. Había más fotos mías y de otras mujeres, también intenté llevarme el celular, pero entré en shock”, explicó.

Durante un año aproximadamente, la joven acudió con Abraham para masajes descontracturantes. Siempre tuvo una leve sospecha de que algo no estaba bien con sus actitudes, pero nunca se imaginó que viviría una situación de abuso.

“Durante una sesión sentí que se le pasaba la mano, no se sentía como un masaje habitual, fue incómodo. Le pedí que tuviera más cuidado”, acotó.

Otro de los comportamientos que pusieron en alerta a Marcela, es que el fisioterapeuta dejaba el celular en las piernas de la joven, supuestamente porque se estaba mensajeando con el siguiente paciente.

Lo que más lamentó es que Abraham es conocido en el ambiente deportivo, sin embargo, una persona que estudió con él le reveló que este no terminó la carrera, es decir, ejerce sin estar plenamente certificado.

La joven denunció en redes sociales la situación que vivió con Abraham, quien tiene su consultorio en el fraccionamiento Chuburna Inn. Y, además, acudió a la agencia de la Fiscalía General del Estado (FGE) de Cordemex donde se inició la carpeta de investigación 000907/2021.

“He recibido mensajes machistas de amigas cercanas a mi círculo, otras dicen que desgraciadamente no se hará nada o que no pueden compartir la publicación porque el tipo las demandará por difamación. Esos comentarios solo me generan enojo y más ganas de enfrentar esto y buscar que no se quede impune”, abundó.

A Marcela la respaldan otras mujeres que también se sumaron a su denuncia y exhorta a quienes fueron víctimas de Abraham a contactarla para hacer que este caso llegue ante la justicia.