Club de Ninjas, descentralizando el arte con trueques y perspectiva de género
El taller está basado en dotar a las niñas y a los niños de herramientas de teatro que les servirán en la vida cotidiana y en la edad adulta. Además, el curso se paga con un trueque de despensas de víveres o servicios.
Por Claudia Arriaga
Mérida, Yucatán, 9 de julio del 2021.- En abril del 2020, durante la pandemia del Covid-19, la actriz feminista Jazmín Alhelí Chi Vázquez inició el Club de Ninjas para niñas y niños, un espacio para que puedan aprender teatro con perspectiva género. A la par busca descentralizar el acceso a la cultura, pues una de sus características es que el curso se paga con un trueque mensual o quincenal de despensas de víveres o servicios.
“Busco posicionar el trueque como economía alternativa con la que sustento mi vida, es un proyecto que tengo. Las mamás lo que me ofrecen son despensas quincenales o mensuales y eso me permite tener alimentos de manera constante y no me preocupo de qué voy a comer. Me permite generar una agenda diferente a las Instituciones, aún trabajo con éstas, pero intento que cada vez sea menos”, explicó.
Es importante señalar que Jazmín ocasionalmente trabaja con instituciones por dinero, mientras que fuera del oficialismo es a través de trueques. “Trabajo en obras de teatro de títeres para niñas y niños al interior del estado y en la ciudad buscando descentralizar el acceso a la cultura y por eso surge el Club de Ninjas”, apuntó.
Las despensas pueden estar conformadas de acuerdo a lo que cada familia tenga a su alcance, excepto carne o productos de origen animal. Lo importante es enseñar a las niñas y a los niños a valorar la enseñanza desde otra visión, que no sea exclusivamente económica.
Además, el Club de Ninjas está basado en dotarlos de herramientas de teatro que les servirán en la vida cotidiana y la edad adulta. Jazmín creó una metodología de enseñanza basada en la ternura radical – que utiliza como fortaleza la paciencia y el amor, sin dejar de ser críticos- y el juego como eje central.
“Somos personas que nos encontramos y las niñas y niños se tienen que poner de acuerdo, lo que yo hago es guiar los vínculos para que todo fluya de manera sana y con perspectiva de género. Yo quiero regalarle a cada ninja la convicción de que puedan realizar lo que se propongan”, dijo en entrevista.
“Te ayuda a desarrollar habilidades concretas como voz, respiración, imaginación y cuerpo, pero también es un espejo constante de la vida; por ejemplo, aprendes a desarrollar la voz, pero en la vida te da la fortaleza para tomar la palabra y defender o cambiar lo que no te gusta”, sentenció la actriz.
El Club de Ninja inició con una niña y un niño, posteriormente se sumaron cuatro más, pero hoy solo tres concluyeron para llegar a la tercera presentación. La joven no obliga a nadie a permanecer, de hecho, fueron los niños infantes quienes manifestaron que debido a la carga escolar no podían continuar.
“El primer proyecto fue un video donde participamos en Alas y Raíces, un programa de actividades culturales para la niñez, lo aprendido lo pusimos al servicio de contar historias donde podemos imaginar mundos imposibles para hacerlos posible. Luego tuvimos otra en diciembre”, comentó.
Jazmín reconoce que cada niña y niño con el que trabaja se volverá una persona adulta reflexiva y crítica, justo por eso intenta que a través del teatro sean conscientes de la sociedad en la que viven y cuestionen qué papel quieren realizar.
Finalmente, el grupo terminará esta primera etapa de Club de Ninjas con la interpretación de la obra “El pequeño Moser” de Valeria Loera, la cual consiste en un montaje escénico digital en papel. Sobresale que, cada uno de los participantes adaptó los diálogos, eso sí, previamente la leyeron y analizaron cada personaje.
*Club de Ninjas abrirá otro segundo grupo a partir del mes de septiembre, el cual está dirigido a menores de 8 a 14 años. Si deseas inscribir a alguno puedes hacerlo al teléfono 9993 32 31 44