Con aires triunfalistas, el secretario de Desarrollo Social y operador político de Vila, aseguró que está abatiendo la marginación en Yucatán, a pesar de que el Coneval dice lo contrario, ya que la mitad de la población vive en pobreza. 

Por Herbeth Escalante

Mérida, Yucatán, 14 de diciembre de 2022.-La arrogancia tiene sus propios números y no reconoce que la mitad de la población en Yucatán vive en pobreza. El operador político de Vila, quien también suele realizar tareas de secretario de Desarrollo Social, Roger Torres Peniche, no pudo desmentir la difícil situación de marginación que impera en la entidad cuando fue cuestionado en una entrevista de minuto y medio.

Al finalizar un evento en Kanasín, el funcionario estatal fue abordado por Haz Ruido para preguntarle si le alcanzará el tiempo al Gobierno del Estado para sacar de la pobreza a un millón 156 mil personas. Sin frenar el paso hacia su camioneta, dijo que sí e incluso aseguró que ya la están abatiendo (sic). 

-¿Por fin se podrá revertir la situación de pobreza en Yucatán?- le cuestionó el periodista al notar que el secretario no tenía intención de detenerse.

-Lo estamos haciendo, yo creo que lo hemos demostrado día a día- declaró con tono triunfalista, como si se tratara de un discurso político en un mitin del PAN.

-¿Si les va a alcanzar el tiempo?- le preguntó el reportero, con la intención de aterrizar la entrevista al campo de la seriedad.

-Los números lo dicen- expresó, mientras que sus asistentes se acercaron para acompañarlo en su trayecto y grabar la entrevista.

-Un millón 156 mil personas viven en pobreza- le recordó el periodista, haciendo referencia al informe del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) 2020, que se publicó este mismo año. 

-Los números lo dicen- insistió Roger Torres, sin precisar a qué números se refería.

-La mitad de la población de Yucatán vive en pobreza- le reviró el comunicador, quien también aceleró el paso para que el funcionario “no se le escapara”.

-Oye, eso no lo digo yo, lo dicen los números y simplemente los números dicen que estamos abatiéndola- sostuvo con aires de enojo.

-¿Qué números, secretario?- soltó el periodista, en espera de que ahora sí revelara a qué números se refería.

-Lee el Coneval- expresó con acento imperativo, como cuando da órdenes a funcionarios de segundo nivel en la Sedesol y a los panistas que le hacen la barba cuando se dirigen a él como Papá Toro.

-Pero el Coneval señala que la mitad de la población está en pobreza- le volvió a decir el comunicador.

-Lee el Coneval- insistió, quizás porque se quedó sin argumentos o talvez porque ya estaba molesto. Eso sí, su camioneta estaba a pocos metros y con el motor encendido. 

-263 mil personas están en pobreza extrema- le lanzó Haz Ruido, citando las cifras oficiales y medibles del Coneval.

-Lee el Coneval- repitió el funcionario, dándole la espalda al entrevistador. 

-¿Si le va alcanzar el tiempo a este gobierno para revertir la pobreza?- preguntó por segunda ocasión, esperando ahora sí, una respuesta realista.

-Por supuesto que sí- enfatizó el expriísta.

-¿Oiga,  y usted va a terminar su gestión como secretario?- inquirió el periodista.

-¿Y por qué no voy a terminar como secretario?- soltó Roger Torres mientras reía irónicamente. 

-Porque la otra vez usted se fue a las elecciones a coordinar campañas, secretario- le tuvo que recordar el comunicador, en referencia a los comicios intermedios del 2021 en donde coordinó parte de la campaña del PAN.

-¿Por qué no voy a terminar?- sostuvo, dejando atrás al reportero.

-¿Esta vez no se va a ir a coordinar campañas, secretario?- lanzó la última pregunta. No hubo respuesta. Se subió a su camioneta y se fue de Kanasín.

Roger Torres solicitó licencia el 1 de abril del 2021 para unirse a la campaña del PAN, en la que coordinó a varios candidatos que actualmente son diputados. El funcionario, que tiene como obligación generar políticas públicas para combatir la pobreza, dejó su cargo unos meses para buscar votos, a pesar de que miles de personas sufrían los estragos económicos de la pandemia.