4 mil menores de 15 años se convirtieron en madres
Otras 69 mil adolescentes entre 15 y 19 años dieron a luz en Yucatán de 2009 al 2018. Se trata de un problema de salud pública que debe atenderse.
Por Lilia Balam y Katia Rejón
Mérida, Yucatán, 10 de mayo de 2019.- El embarazo en mujeres adolescentes es un problema de salud pública en el que se pone en riesgo su vida e integridad y lamentablemente, es una realidad en Yucatán: del 2009 al 2018 dieron a luz 4 mil 150 menores de 15 años de edad en centros de salud del Gobierno del Estado.
Datos obtenidos en la Secretaría de Salud indican que tan sólo el año pasado, 175 mujeres en ese rango se convirtieron en madres, mientras que en 2017 hubo 260 casos.
Los municipios con mayor incidencia de adolescentes que tuvieron hijas o hijos son Mérida, Valladolid, Umán, Kantunil, Ticul, Tizimín, Kanasín, Yaxcabá y Progreso.
De hecho, Yucatán es la séptima entidad en el país con mayor tasa de embarazos en niñas y adolescentes de 10 a 14 años, de acuerdo con el Consejo Nacional de Población (Conapo).
Por otra parte, en el mismo periodo de tiempo, 69 mil 647 adolescentes entre 15 y 19 años de edad fueron madres en el estado:
6 mil 595 en el 2009; 7 mil 313 en el 2010; 7 mil 612 en el 2011; 7 mil 65 en el 2012; 7 mil 898 en el 2013; 8 mil 900 en el 2014; 8 mil 633 en el 2015; 7 mil 175 en el 2016; 5 mil 110 en el 2017 y 3 mil 346 en el 2018.
En Mérida, Ticul, Valladolid, Peto, Kanasín y Progreso se registró el mayor número de incidencias. La Secretaría de Salud declaró “inexistente” la información correspondiente al 2019.
El convertirse en madres a temprana edad representa un obstáculo para su progreso personal, social y profesional, pues un alto porcentaje tiene que abandonar los estudios y por lo tanto, no siempre obtienen empleos bien remunerados.
A pesar de que en la mayoría de los casos de embarazo adolescente los progenitores son mayores de edad, el estigma, la violencia, el riesgo y la manutención del bebé recae en las jóvenes.
Además, de acuerdo con expertos en el tema, el embarazo en niñas y adolescentes es una manifestación de violencia y conlleva mayores probabilidades de mortalidad y morbilidad, tanto de la madre como del recién nacido.
Por otra parte, en Yucatán del 2009 al 2018 se recibieron alrededor de 2 mil 726 denuncias por violación sexual, de acuerdo a información proporcionada por la Fiscalía General del Estado a través de solicitudes de transparencia; sin embargo no se obtuvo información desagregada por sexo, ni municipio, ni por edad.
Sobre esta problemática, la investigadora de la Universidad Autónoma de Yucatán (UADY), Ligia Vera Gamboa, recalcó que solo una de cada cuatro violaciones se denuncia. Agregó que la mayoría de las veces los agresores son gente conocida o cercana a la víctima, como sus propios familiares.
A los servicios de salud llegan víctimas de violación de todos los estratos sociales, desde los 12 a los 40 años. También han llegado infantes de dos a 10 años, informó la Jefa del Departamento de Prevención y Atención de la Violencia Familia y Género de la Secretaría de Salud local, Geny Beatriz Sánchez Fernández.
La funcionaria comunicó que cuando las víctimas de una violación llegan a los servicios de salud estatales, el personal sigue el proceso la NOM 046 que puede incluir la interrupción voluntaria de embarazo. En ese sentido, añadió que en el 2017 se realizaron los primeros abortos y en su mayoría se empleó el misoprostol.
También afirmó que “cien por ciento” de quienes han solicitado la interrupción la han obtenido y que hasta ahora, sólo dos mujeres adultas jóvenes de Mérida no quisieron abortar tras una violación: una en el 2017 y la segunda en el 2018. (Fotografía de Valentina Álvarez)
Fragmento del reportaje “Maternidad forzada. El mito del aborto legal en Yucatán”, que puede consultarse en www.abortoyucatan.com