Dichos y hechos: Quizás es oportunismo o tal vez falta de oficio político, pero la realidad es que los intereses personales y los caprichos suelen disfrazarse con discursos de “ayuda humanitaria”.

Por Herbeth Escalante

Mérida, Yucatán, 27 de agosto de 2020.-Dicen que las crisis sociales, como la actual pandemia del Covid-19 que vapulea a Yucatán, saca lo mejor y lo peor de cada persona y nos exhibe de cuerpo completo. Y justo ahora, está puesto el escenario para conocer cómo son en realidad quienes juegan a hacer política.  

Lamentablemente, hay quienes se aprovechan de la desesperación y el dolor de la población más vulnerable para hacer campaña, sí, para posicionar su imagen de cara al proceso electoral que se avecina.

Quizás es oportunismo o tal vez falta de oficio político, pero la realidad es que los intereses personales y los caprichos suelen disfrazarse con discursos de “servicio”, “sensibilidad” y “ayuda humanitaria”. 

En medio del drama de esta contingencia, volvió a sonar el nombre de la expriísta y excandidata plurinominal del Verde Ecologista, actual asesora del gobierno estatal panista, Jessica Saidén Quiroz, quien no deja de inundar las redes sociales con fotografías suyas repartiendo apoyos, y hasta creó una asociación llamada Juntos Sembrando Yucatán para extender su imagen en varios municipios.

La excandidata a la alcaldía de Progreso publica cada despensa, cubreboca, bastidor, ración de comida, láminas y cualquier otro apoyo que entrega a la gente que en estos momentos está pasando por momentos dificilísimos. Los beneficiarios, mujeres y hombres de escasos recursos,  se vuelven utilería en esta puesta en escena de Jessica Saidén para obtener alguna candidatura.

En una ocasión, compartió un video en Instagram en el que se escucha claramente que una simpatizante suya le dicta a una mujer humilde cómo tenía que agradecerle por mandarle un apoyo. El hecho no sólo es humillante, causa enojo y frustración.

En otro video, se observa cómo interactúa por unos segundos con un adulto mayor con el que se encontró en una carretera, a quien le donó una bolsa con ayuda alimentaria y un cubreboca. “Tome, seguramente le va a hacer mucho bien”, le dice la asesora, mientras que la cámara del celular no deja de grabar al hombre, como si se tratara de algo exótico.

¿Es necesario presumir cada gesto de caridad? ¿Se vale exponer a mujeres y hombres en situación de pobreza? ¿Estamos en momentos de alardear que somos buenas personas? ¿O la desfachatez justifica cualquier interés político?

Aunque la amiga del gobernador Vila se presenta como una persona “que le encanta ser humanitaria”, su incesante necesidad de figurar está evidenciando su falta de empatía con la gente más golpeada en esta emergencia de salud y económica.

Es estos momentos de crisis, la ciudadanía no está pendiente en saber qué están haciendo o dejando de hacer los políticos, pue está más preocupada en sobrevivir y en no enfermarse. Pero eso sí, la gente se da cuenta de quiénes se están aprovechando de la tragedia y seguramente se acordarán de ellas y de ellos en las elecciones.

Ya mejor ni especular cuál partido le daría cabida a Jessica Saidén ni que posición pretender alcanzar. ¡¿Quién asesora a la asesora?¡

*Comunicólogo social y periodista.