Policía no permitió sembrar ceiba en Remate de Montejo
Activistas y académicos intentaron colocar ese árbol para conmemorar la resistencia de los pueblos originarios ante la invasión de los españoles.
Recordaron que la estatua a Los Montejo, levantada en 2010, es una exaltación al racismo que sirve para mantener simbólicamente la discriminación que hasta ahora se padece en Yucatán.
Por Herbeth Escalante
Mérida, Yucatán, 13 de octubre de 2019.- Anoche, activistas y académicos intentaron sembrar un árbol de ceiba en la glorieta del Remate de Paseo de Montejo para conmemorar la resistencia de los pueblos originarios ante la invasión de los españoles el 12 de octubre de 1492. Sin embargo, elementos de la Policía Municipal de Mérida no permitieron que se realice el acto.
La intención de las y los manifestantes era sembrar la ceiba en ese lugar en donde hace nueve años el ayuntamiento levantó una estatua a Los Montejo, fundadores de Mérida que masacraron a los mayas de la antigua T’hó durante la “conquista”.
Explicaron que eligieron la ceiba porque tiene un profundo significado espiritual para la cultura e historia del pueblo maya, por lo que sería una opción para sustituir al monumento a los invasores españoles, que consideran anacrónico.
“La estatua a Los Montejo es una exaltación al racismo, sirve para mantener simbólicamente la discriminación que hasta ahora se padece en Yucatán”, explicó la activista Martha Capetillo Pasos durante la protesta.
Pero justo cuando iban a sembrar la ceiba, los policías municipales arribaron a la glorieta y no lo permitieron, argumentando que no habían presentado los permisos correspondientes para hacerlo.
Las y los manifestantes señalaron que no estaban cometiendo alguna ilegalidad, por el contrario, su única intención era recordar la resistencia de los pueblos originarios ante la invasión de los españoles, colocando un nuevo monumento para ellos, la ceiba.
También recordaron que en 2010, en pleno Bicentenario de la Independencia de México, el entonces alcalde de Mérida, César Bojórquez Zapata, impuso la estatua a Los Montejo, sin consultar a la ciudadanía.
“Lo hizo en el último día de su administración, sin hacer público que lo colocaría. Puso esa estatua para enaltecer a quienes llegaron a invadir y destruir en agravio del pueblo maya… ese no es un monumento histórico”, declaró Martha Capetillo ante los oficiales.
Tras casi una hora de discusión, la Policía Municipal insistió que no estaba permitido sembrar el árbol, por lo que las y los activistas optaron por ponerlo en una maceta al pie del monumento a Los Montejo.