Se disculpan y bajan cuota del Cemus
La secretaria de la Cultura y las Artes, Erica Millet, propuso que la colegiatura sea de 250 pesos al mes. Reconoció que debió involucrarse más desde un principio para solucionar el problema.
Por Herbeth Escalante
Mérida, Yucatán, 19 de febrero de 2019.- La titular de la Secretaría de la Cultura y las Artes (Sedeculta), Erica Millet Corona, pidió disculpas a las madres y padres de familia del alumnado del Centro de Música “José Jacinto Cuevas” (Cemus) por el mal manejo de la situación ante la crisis económica que atraviesa esa escuela; además, les propuso que la cuota mensual sea de 250 pesos, es decir, ya no será de 500 pesos como se exigió en días pasados.
En una junta celebrada ayer lunes, la funcionaria reconoció que debió involucrarse más y desde un principio en esta problemática para tratar de hallar una solución. Es más, recalcó que lo se pensaba cobrar por estudiante era una cifra exagerada.
Como publicamos en exclusiva en Haz Ruido, el pasado lunes 11 de febrero el director de Proyectos y Evaluación de la Sedeculta, Saúl Villa Walls, informó a las y los tutores que no cuentan con recursos para seguir ofreciendo los talleres a las niñas, niños y adolescentes del Cemus, debido a recortes en una bolsa federal. Incluso, dijo que la única manera en que pudiera sobrevivir ese Centro era con una colegiatura de 500 pesos al mes.
Ante la molestia que esto generó en un importante sector de madres y padres de familia, así como la falta de tacto al momento de abordar este escenario, Millet Corona convocó una nueva junta en la que pidió disculpas y explicó que el complicado panorama económico se debe a que hubo un recorte al Apoyo a Instituciones Estatales de Cultura (AIEC), del cual se pagaba la nómina de las y los docentes. Agregó que para este año, sólo les aprobaron cinco millones de pesos, recursos que son insuficientes para la operación de la escuela y otros proyectos.
Sin embargo, dio a conocer que la dependencia pagará un subsidio para el sueldo del profesorado, por lo que pidió la colaboración de las y los tutores para que eroguen 250 pesos al mes por concepto de colegiatura y, de esa manera, cubrir la otra parte. Además, señaló que las inscripciones serán de 300 pesos anuales, ya no de 500, y que se cobrará en agosto, no en marzo como se pensaba hacer en un principio.
Abundó que “calcularon” que al cubrirse esas cuotas mensuales del total del alumnado y con el “dinerito que jalarán” de presupuestos que tenían contemplado de otros programas o proyectos culturales, podrán pagarle a las y los docentes.
Añadió que ahora la Escuela Superior de Artes de Yucatán (ESAY) se encargará de los programas de estudio del Cemus, “para reforzarlos y haya una mejor calidad”. También prometió que como esta instancia tomará el control de la escuela, ahora expedirán a las y los alumnos una constancia de “propedéutico”, que les serviría para que más adelante cursen ahí una licenciatura.
“Con esta nueva modalidad prometemos orden administrativo y transparencia en el manejo de recursos”, sostuvo Millet Corona, quien indicó que el déficit que dejó el gobierno estatal pasado sumado a las malas administraciones de dinero, contribuyeron a la delicada situación que enfrenta el Cemus.
Algunas madres y padres de familia tomaron el micrófono para declarar que la nueva cuota es una cantidad “razonable” y que ven con buenos ojos que sus hijas e hijos tendrán un documento que acredite su formación académica. Hubo hasta quienes dijeron que en ese lugar no se cobra tan caro en comparación con otros sitios privados y que “todos tendrían que hacer un esfuerzo”. No faltó quien sostuviera que «ya le regateamos mucho al gobierno».
Pero también otras personas alzaron la voz para cuestionar por qué hasta ahora se informa que el Cemus dependía exclusivamente de un recurso federal; recordaron que el subsidio se erogará de los impuestos de toda la ciudadanía y que es obligación del gobierno facilitar el acceso a la cultura de las niñas, niños y adolescentes.
De igual manera, un padre criticó que el nuevo costo representa un aumento del más del cien por ciento; una madre indicó que no queda claro cómo será el manejo de los planes de estudios que ofrecerá la ESAY, y otro hombre señaló que el hecho de poner sobre la mesa la nueva propuesta genera inequidad, porque habrá quienes puedan pagarlo y quienes no.
«Con esta reestructuración no sé qué voy a hacer, tendré que decidir cuál de mis dos hijos seguirá viniendo al Cemus y cuál no”, agregó otro padre de familia.
Uno más precisó que si funcionarios de la antigua gestión cometieron irregularidades financieras que provocaron el déficit, deberían ser castigados, “de lo contrario habrá impunidad y ustedes serán cómplices”.
Una mujer destacó la alta calidad de las y los profesores de música, por lo que hizo un llamado a las autoridades de la Sedeculta para que, si ahora van a cobrar una colegiatura más elevada, no se atrasen con sus sueldos. La funcionaria prometió que así será y que no habrá despidos.
Llamó la atención que Millet Corona enfatizó que está dando la cara ante este problema, que no tomarán decisiones unilaterales y que su intención no es afectar los bolsillos de las madres y padres de familia. Igualmente, sostuvo que lo más fácil sería tomar medidas populares, pero que no lo puede hacer porque no hay dinero.
“Estoy consciente que es mi obligación responder y dar la cara de frente, pero podría no estar aquí (sic)”, respondió la secretaria ante el cuestionamiento de una madre.