Chino, perrito sagrado de Kukulcán, ya tiene hogar digno
Tras ser rescatado de Chichén Itzá con una severa lesión y luego de un largo proceso de recuperación, el can fue adoptado por una familia de Progreso.
Por Redacción
Mérida, Yucatán, 13 de marzo de 2023.- Tras ser rescatado de un ambiente hostil, en las inmediaciones de Chichén Itzá, y con el riesgo de perder la patita trasera derecha por una grave herida que presentaba, el “Chino”, uno de los “perritos sagrados de Kukulcán”, encontró un hogar donde tendrá una vida digna junto a otros cinco perritos.
La entrega del “lomito” a su nueva dueña, la señora Elizabeth Valerio Hernández, corrió a cargo de Lourdes Durán Leal, de la asociación protectora de animales Perpópolis, poco después de las 9 de la mañana en el predio 97 K de calle 41 entre 56 y 58, del Fracc. Las Fuentes, de Progreso Yucatán.
Minutos antes, cuando llegó el perrito a la puerta del predio de lo que sería su nuevo hogar, mismo que fue llevado por el director general de Cultur Mauricio Díaz Montalvo, la señora Elizabeth salió de su casa y expresó: “¡Bienvenido chino a tu nuevo hogar”, en tanto que lo abrazaba y le besaba su cabecita.
Al momento de entrar a la casa, Elizabeth avisó a sus hijos: “Ya llegó el nuevo hermanito”. De inmediato lo llevó al patio donde se encontraban otros cinco canes -“Lola”, “Mía”, “Chiquitito”, “Chichín” y “Nena”- que también están bajo la custodia de la adoptante.
Al darse este encuentro de Chino con sus nuevos compañeros, sólo hubo unos leves gruñidos de aparentes celos, pero en menos de dos minutos, luego de olfatearse entre sí, se generó un ambiente de cordialidad canina.
“¡Muchas gracias por adoptarlo!”, expresó Díaz Montalvo a Elizabeth, quien respondió: “Al contrario, gracias a ustedes por la confianza”.
En ese momento, la presidenta de Perpópolis expuso que cuando hizo la visita para verificar las condiciones del lugar en donde estaría “Chino”, no fue necesario hacer preguntas, ya que la ahora adoptante expresó que ha tenido otros perros que murieron de viejos, que cuenta con el respaldo de un veterinario, y además la casa está cerrada.
“Se nota que ama a los animalitos y no me quedó la menor duda de que chino queda en las mejores manos”, agregó.
Mauricio Díaz explicó que el perrito fue rescatado por personal de Cultur en julio del año pasado en los alrededores de Chichén, pero dadas las condiciones en que llegó su recuperación fue muy lenta.
“Lo tuvimos unos meses en un hogar temporal y luego estuvo unos días en Cultur. Eso hizo que el animalito se vuelva sociable y noble”, añadió.
Acto seguido, Lourdes Durán, de Perpópolis, procedió a la entrega formal del “perrito sagrado” mediante la firma de un contrato de adopción. El documento, que establece una serie de compromisos, fue signado por la señora Valerio Hernández y hasta el propio perrito que estampó su huella.
Luego, Mauricio Díaz entregó a la señora Valerio Hernández el carnet donde consta la atención veterinaria que recibió chino en la Clínica Planned Pethood.
“Me siento muy contenta por la confianza que me dieron para poder adoptar al perrito. Me enterneció mucho su historia, que leí en redes sociales, porque me considero una defensora de los animales”, expuso Valerio Hernández.
“Siempre he pensado que estas criaturas tienen el derecho de ser respetadas y que tengan una vida y un hogar digno; que tengan un techo, agua y comida. Y para mí, no son unos simples animales, sino que forman parte de mi familia ¡Por siempre estaré a favor de sus derechos!”, agregó.
Al cuestionarle sobre si conoce la historia de Chino, respondió: “Me llamó mucho la atención de que es un “perrito sagrado de Kukulcán” y de cómo llegó lastimado a Mérida. Se lo mostré a mis hijos y les dije que haría todo lo posible para que “chinito” sea mío y hoy ya lo es”.
Al despedirse Mauricio Díaz expresó: “Bueno chino, ya estás, ya tienes un hogar digno”.