Feministas yucatecas protestaron por todas las mujeres desaparecidas
“Nuestras desapariciones no son casos aislados, no es porque estábamos solas, ni porque nuestras amigas nos abandonaron, no es por cómo íbamos vestidas ni por la hora”.
Con información y fotografías de Lilia Balam.
Mérida, Yucatán, 24 de abril de 2022.- Feministas yucatecas se sumaron a la movilización nacional en la que se exige justicia por la muerte de la joven Debanhi Escobar y por todas las mujeres desaparecidas y víctimas de feminicidio en la entidad y en México.
La protesta fue convocada en la Plaza Grande del Centro Histórico desde donde hicieron un llamado a las autoridades a frenar la ola de violencia feminicida que azota al país.
“Nuestras desapariciones no son casos aislados, no es porque estábamos solas, ni porque nuestras amigas nos abandonaron, no es por cómo íbamos vestidas ni por la hora, lo que está ocurriendo es violencia estructural que tiene que ver con la inseguridad del país, el narcotráfico, con un problema que nos atraviesa de diferentes maneras”, declaró la activista feminista Rosa Elena Cruz Pech.
“No sabemos dónde están muchas de las mujeres reportadas como desaparecidas y al día de hoy ya las han dejado de buscar, porque sabemos que siempre nos olvidan, con el paso del tiempo prefieren que los nombres queden perdidos” sostuvo Cruz Pech.
Dijo que así como ocurre en Nuevo León y en otras entidades del país, en Yucatán las mujeres tienen miedo de caminar solas, de tomar un transporte público y de morir asesinadas.
Como parte de la protesta, las feministas también colocaron un altar para la joven Arlett Heredia Piña, cuyo cuerpo sin vida fue encontrado el año pasado en una vivienda en la colonia Chuburná de Mérida sin que queden claras las causas, ya que su familia sospecha que fue víctima de feminicidio y la Fiscalía de Yucatán asegura que cometió suicidio.
De igual forma marcharon alrededor de la Plaza Grande gritando consignas en las que exigieron que todas las mujeres desaparecidas sean encontradas con vida y que no se repitan casos como el de Debanhi Escobar.