El director de la Policía Municipal, Emilio Raúl Caamal Gutiérrez, fue denunciado por abusar de las empleadas de la corporación, pero sigue en el cargo y las investigaciones no avanzan.  

Por Claudia Arriaga

Progreso, Yucatán, 09 de octubre de 2021.- Diez elementos de la Policía Municipal de Progreso denunciaron al director de la corporación, Emilio Raúl Caamal Gutiérrez, por abuso y hostigamiento sexual, golpes y responsabilidad administrativa. Ya inició la investigación de uno de los casos, pero aún no está separado del cargo. Además, no es la primera vez que lo acusan de cometer delitos.

A la joven Dulce Canché, quien trabajaba en el área administrativa desde el 2018, la agredió sexualmente el 7 de julio de este año. Se defendió y posteriormente fue despedida.

“Antes (Emilio Raúl) ya me había propuesto tener relaciones sexuales. Pasaron días y me mandó a llamar, me preguntó si lo había pensado y le dije que no lo haría, que no tenía por qué hacerlo. Desde ese momento me empezó a fastidiar con que quería tener algo”, declaró la joven. 

“De hecho, él en su oficina tiene un mueble, bueno no se si siga teniéndolo, tenía un mueble, así como de tipo piel, negro, pequeño y ahí me quería empujar para someterme y todo eso, y pues la verdad como el está algo bajito y yo algo grande, puse fuerza y lo empecé a empujar y le dije que no, y ya fue cuando logró tocar  mis pechos. Le dije que iba a gritar, le pedí que me soltara y ya fue que me dijo que era una lesbiana, que porque no lo hacía caso, que a él nadie se le resistía”, relató en entrevista para Haz Ruido.

Karely Rosalía Collins Chacón es otra de las mujeres que sufrió hostigamiento sexual de parte del comandante Emilio Raúl Caamal Gutiérrez. El 25 de agosto la mandó a llamar junto con otros elementos de la corporación y le propuso firmar su baja voluntaria o acceder a tener relaciones sexuales con él.

“Me dijo que yo tenía dos opciones, firmar o no firmar, depende de lo que yo quisiera hacer en ese momento. Realmente yo no fui a buscar nada de eso, yo fui a trabajar como cualquier mujer, como tú, como ella, como todas las mujeres que tienen un empleo. Trabajas por necesidad, tampoco se vale que te hagan proposiciones de ese tipo, ni que te quieran obligar y que te estén tocando”, comentó. 

Además de las seis denuncias por abuso y hostigamiento sexual en contra de Emilio Caamal, existen cuatro por golpes y responsabilidad administrativa. Es el caso del policía David Aurelio Gil Flores, el mismo 25 de agosto lo intentaron obligar a firmar su baja voluntaria y como no aceptó, por órdenes del director fue encarcelado y golpeado por otros elementos.

“A mí y a otros compañeros nos arrodillaron, nos esposaron, nos metieron a la cárcel pública y nos obligaron a realizar trabajos forzosos. Son situaciones que son infrahumanas porque hasta nos mantenían sin agua, muy poco alimento, el mismo que les dan a los presos que en ocasiones es deprimente”, comentó.

Los diez denunciantes ya tienen medidas de protección, pues aseguraron que por órdenes de Raúl Caamal son hostigados por elementos de la corporación. Otra situación que consideraron los pone en riesgo es que las diligencias se llevan a cabo en la Fiscalía de Progreso. Intentaron ser atendidos en Mérida, pero no se los permitieron.

El abogado que representa a las personas entrevistadas, Juan Bautista Herrera Zapata, criticó lo lento que van las investigaciones en las otras nueve denuncias y le preocupa que no le den celeridad a las relacionadas con delitos sexuales. 

“En el caso del abuso sexual todavía no tenemos un avance, hasta donde tengo conocimiento ninguna compañera me ha dicho que sea visitada por la Policía Estatal Investigadora (PEI). Estamos a  la espera de que nos den fecha para los exámenes psicológicos que son necesarios para que exista el reconocimiento de un especialista y determine algún daño psicológico ocasionado, asimismo, para deslindar o acreditar con la veracidad de los hechos mediante pruebas que se les hacen para dar razón que no están inventando situaciones y para darle fuerza al caso”, apuntó.

Llama la atención que Raúl Caamal Gutiérrez debería estar separado del cargo en lo que se realizan las investigaciones, tal como indica  el decreto 200 del Reglamento del Servicio Profesional de Carrera Policial. No solo sigue en el mismo puesto, sino que es la segunda administración en que repite como director, pese a que en el 2019 fue acusado de invadir un predio y robar una motocicleta.