Imposibles, los plazos para terminar el Tren Maya, pero AMLO presiona
Fonatur ha dado 28 meses para construir cada tramo, pero las empresas dijeron necesitar 36 o más siempre que no haya ningún problema. Por su parte, el presidente ha solicitado en varias ocasiones a las encargadas de la construcción acelerar las obras.
Por Redacción
Mérida, Yucatán, 29 de junio de 2021.-Aunque el Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur) ha dado 28 meses de plazo para completar las obras de los tramos 1, 2 y 3 del Tren Maya, un sondeo realizado por dicha dependencia arrojó que el 64 por ciento de las empresas consultadas dijeron necesitar 36 meses o más para completar un tramo, siempre que todo saliera bien y no hubiera ningún inconveniente relacionado con problemas sociales, medioambientales o arqueológicos, informó el periódico El Universal en un reportaje especial.
Mientras tanto, desde la Administración presionan a las empresas constructoras para que avancen en las obras y poder dejar el megaproyecto inaugurado y funcionando cuandoAndrés Manuel López Obrador finalice su mandato en 2024.
En junio de 2019, Fonatur, la firma PWC y el resto de asesores del Tren Maya realizaron una serie de entrevistas con empresas para conocer “el interés del mercado” y evaluar “las capacidades técnicas y de desarrollo del proyecto”. En total se entrevistaron con 37 empresas, 21 de ellas constructoras, con la idea de que sus respuestas fueran insumos para estructurar la obra y sus plazos.
“La mayoría de las empresas se inclinó a un periodo de 36 meses para la construcción de un tramo de 250 kilómetros” y que “las empresas con más experiencia en construcción de vías férreas se inclinan por un plazo entre 36 y 48 meses”, se lee en el informe sobre ese sondeo. “También la mayoría de las empresas consideró que 24 meses no es un tiempo suficiente para llevarlo a cabo por que este plazo incluye la elaboración del proyecto ejecutivo, que tomaría de 6 a 12 meses para realizarlo”. además, señalan que “el plazo estimado es considerando que no existen retrasos causados por temas ambientales, sociales o de derecho de vía”.
Pero, en las licitaciones de los tramos 1,2 y 3 del Tren Maya, el plazo dado a las empresas para entregar la vía férrea perfectamente construida es de 28 meses. El Tramo 1 contempla los 228 kilómetros que separan Palenque de Escárcega; el 2 son 235 kilómetros y va de Escárcega a Calkiní; y los 172 kilómetros del 3 unirán Calkiní e Izamal, atravesando los suelos complejos y huecos de Yucatán y sus cenotes.
El presidente López Obrador ha solicitado en varias ocasiones a las empresas encargadas de la construcción del Tren Maya acelerar las obras. En diciembre de 2020, en una visita al Tramo 2, del que se encarga Grupo Carso del ultramillonario Carlos Slim, declaró: “es una recomendación respetuosa a que se abran más tramos, así se avanza más”.
En marzo de 2021, en su siguiente visita de supervisión a las obras, volvió a pedir más tramos y avances más rápidos. “Si nos atrasamos voy a estar cada dos meses, cada mes, cada 15 días aquí”, advirtió.
Que hay prisas por acabar el Tren Maya antes de dejar Palacio Nacional es más que evidente. En diciembre de 2018 López Obrador dijo que ese mes se iba a iniciar “la construcción en Palenque”. En febrero de 2019, prometió que la licitación saldría en marzo y en junio garantizó que en 2019 comenzarían las obras. En diciembre de ese año el Ejecutivo aseguró que habría obras en marzo de 2020. Entre el 23 de abril y el 15 de mayo de 2020 se adjudicaron los tramos 1, 2 y 3 del Tren Maya, inaugurando la obra física en junio, solo un mes después, sin dar tiempo casi tiempo para realizar un proyecto ejecutivo de calidad.
En mayo de 2021, Héctor Ovalle, director de la constructora Coconal, cuestionó los tiempos marcados desde el Ejecutivo para el Tren Maya y otras obras insignia. “Si el proyecto tiene riesgos que vas a asumir sin conocer, sin medir y además de antemano sabes que no se va a cumplir, no hay que tomarlo”, dijo en una videoconferencia con el Colegio de Ingenieros Civiles de México.
Tras la tragedia del Metro de Ciudad de México, en la que fallecieron 27 personas y hubo cerca de 80 heridos, se han establecido paralelismos entre las prisas políticas por acabar el Tren Maya con las que hubo por inaugurar la Línea 12 antes de la salida de Marcelo Ebrard como jefe de Gobierno de la Ciudad de México.
Preguntado al respecto, Rogelio Jiménez Pons, director de Fonatur, contestó que era “una advertencia oportuna” pero que debían acabar la obra en los plazos marcados, así tengamos que “morirnos en la raya”. Por cierto, dos empresas que construyeron la Línea 12, ICA y Grupo Carso,tienen adjudicados tramos del Tren Maya. (Reportaje de El Universal)