Yolanda pasó de empacadora a “viene viene” en la pandemia
Debido a que las autoridades no permiten que los adultos mayores regresen a trabajar a los supermercados por pertenecer al grupo vulnerable, tienen que buscar otras opciones en la calle para sobrevivir.
Por Claudia Arriaga
Mérida, Yucatán, 9 de noviembre del 2020.-Yolanda Bochas y sus colegas empacadores fueron retirados de los supermercados desde hace ocho meses, los enviaron a casa por tratarse de población vulnerable en esta pandemia. Sin embargo, debido a la necesidad, aceptó trabajar de “viene viene” en un sitio donde el riesgo de contagio también es alto.
Pero ella no es la única, sus demás compañeros tuvieron que buscar otras opciones de empleo de bajos ingresos. La mayoría no se pudo quedar en sus viviendas, tienen que salir a trabajar para sobrevivir.
“Estuve trabajando en ventas de cambaceo casa por casa, pero es demasiado pesado. Desde las 7 de la mañana hasta 7 las siete de la noche, entonces lo dejé de hacer porque las piernas se me pusieron rojas. Metí solicitudes de empleo en farmacias, pizzerías, etc. y nada”, relató.
En agosto, ella y sus compañeros protestaron frente al Palacio de Gobierno para pedir regresar a sus puestos con las medidas sanitarias. Sus peticiones no fueron escuchadas, únicamente les enviaron 20 despensas para quienes acudieron a plantarse a la calle.
A sus 67 años, Yolanda está agradecida con la oportunidad de seguir trabajando, estudió para ser secretaria bilingüe, pero ya nadie la contrata. Además, debe hacerse cargo de su hija Mariana, cuya salud es delicada por un trasplante de riñón. La joven estuvo internada durante tres semanas debido a que contrajo una bacteria y su vida estuvo comprometida.
“No me apena trabajar de “viene viene” porque gracias a eso tengo dinero. Yo estoy aquí por mi hija, ella necesita que esté con ella y aquí sigo ¿ hasta cuando? no lo sé”, explicó.
La principal preocupación de Yolanda no es laboral, también debe comprar cada mes tres cajas de ácido micofenólico para su hija. Lamentablemente, desde hace dos meses el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) no cuenta con el medicamento.
Al igual que los demás empacadores, Yolanda espera pronto poder regresar a trabajar al supermercado. En tanto, acude al estacionamiento de un supermercado para guiar a los autos y ayudar a las personas con su compra. Se cuida usando gel antibacterial, sanitizante y cubrebocas.
Aunque está agradecida con tener algo de ingresos, reconoce que gasta más en transporte, primero estuvo en el turno de la noche y debía pagar 40 pesos para regresar a casa porque ya no pasaban autobuses. Y ahora que está de día, tiene que abordar tres autobuses. Llama la atención que Yolanda es la única mujer “viene viene” en el área donde trabaja.
El Gobierno del Estado ha permitido la reactivación de casi todas las actividades económicas, pero sigue con la medida de cuidar a las personas mayores de 60 años de edad manteniéndolas en casa. El problema es que muchos viven en estado de precariedad.
*Si deseas ayudar a Yolanda con el medicamento ácido micofenólico puedes enviarnos un mensaje vía Facebook.