Vulnerables en las prisiones yucatecas: Ya son 13 contagios
Yucatán es el segundo estado del país con mayor número de casos de personas contagiadas de Covid-19 en los penales.
El sistema penitenciario ha olvidado a muchas personas privadas de su libertad y el ataque de esta pandemia hace que sean todavía más vulnerables, sostuvo Reinserta.
Por Lilia Balam
Mérida, Yucatán, 7 de mayo del 2020.-El número de contagios de Covid-19 en los centros penitenciarios de Yucatán se elevó a 13. Esta situación visibiliza la alta vulnerabilidad del personal que labora en esos sitios y de las personas privadas de la libertad ante la pandemia, pues el sistema penitenciario local no es ejemplar, declaró la directora general y cofundadora de la asociación Reinserta, Saskia Niño de Rivera.
De acuerdo con la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), en una semana se detectaron cinco casos nuevos del virus en cárceles yucatecas, por lo que actualmente ya son 13 los diagnósticos positivos.
Todos los pacientes son hombres, pero el organismo no especifica en qué centros se encuentran. Dicha estadística coloca a Yucatán como el segundo estado del país con mayor número de casos de Covid-19 en los penales, sólo por debajo de Jalisco, donde hay 40.
Al respecto, Niño de Rivera señaló que este panorama visibiliza la alta vulnerabilidad de quienes están privadas de la libertad y de los que laboran en estos lugares, “pues el sistema penitenciario ha caído en el olvido y eso impide el adecuado acceso a la salud de la población penitenciaria”.
“Desafortunadamente tenemos a muchas personas dentro de la cárcel que tienen otro tipo de enfermedades que no han sido atendidas. El sistema penitenciario de Yucatán no es un sistema ejemplar, ni de cerca, y hay personas que han sido olvidadas desde muchos aspectos y el ataque de esta pandemia hace que sean todavía más vulnerables”, sostuvo.
La directora de Reinserta criticó que no se hubieran tomado medidas de prevención, como el cierre de visitas familiares desde el primer día de la contingencia sanitaria, tanto en los reclusorios yucatecos como en los de otros estados del país.
“Fue impresionante que el Gobierno Federal determinara sana distancia, el ‘quédese en casa’, y en los penales seguían aceptando visitas familiares, personas transportándose de un lugar a otro en los reclusorios, vulnerando más a las personas privadas de la libertad”, señaló.
Por ello, es urgente que las autoridades locales tomen medidas para evitar la propagación de la enfermedad en los reclusorios, comenzando por aplicar de manera oportuna de pruebas de Covid-19 entre la población penitenciaria y garantizar la dotación de artículos de higiene y de protección, como cubre bocas y antibacteriales en las cárceles.
También es necesario disminuir la cantidad de personas internas a través de recursos como las pre liberaciones, las cuales son un derecho constituido en la Ley Nacional de Ejecución Penal.
“De igual forma ver qué se puede hacer con la Ley de Amnistía, aunque es una ley federal, es algo que se debe ver de manera inmediata para que podamos salvar más vidas y pueda haber más espacio en las cárceles”, agregó.